La Gala de Recursos Humanos 2018 galardonó a Lucio Fernández, Director de RR. HH. de ATRESMEDIA, con el Premio Foro de RR. HH. al Mejor Comunicador, por su labor en la comunicación en recursos humanos y su visión sobre la cultura digital de las organizaciones y su relación con el talento.

Como cada año, en WTC tuvimos la oportunidad de hablar con todos los premiados y compartir nuestras entrevistas en el Directorio Quién es Quién de RR. HH., la guía profesional más importante del sector. Ahora, con motivo de la próxima celebración de La Gala 2020, que se celebrará el 27 de febrero en el Hotel Palace de Madrid, compartimos las palabras de Lucio Fernández, con el que conversamos sobre liderazgo, tecnología y las tres claves para entender el futuro de la comunicación en recursos humanos.

Hablamos con Lucio Fernández

Ahora está muy de moda hablar de talento y de liderazgo, ¿pero qué significa ser un profesional con talento? ¿Cuáles son los rasgos de liderazgo necesarios para gestionar personas eficazmente?

En primer lugar, quiero decir que creo que la clave no es descubrir al profesional con talento, sino descubrir y fomentar el talento de cada uno de nuestros profesionales. Cada persona es capaz de aportar si somos capaces de poner los medios y de construir un ambiente que fomente el trabajo en equipo, el emprendimiento interno, la iniciativa o la innovación. El futuro de cada compañía depende de lo que seamos capaces de aportar, de arriesgarnos y de evolucionar cada uno en la posición que ocupamos. Las personas con un talento especial existen, y hay que identificarlas y cuidar su desarrollo, pero no podemos ni debemos olvidar el talento oculto que se activa involucrando, comprometiendo, reconociendo, comunicando y trabajando en equipo.

Respecto al liderazgo, creo que hay tres características fundamentales para ser un líder en cualquier actividad: innovación (que tenga iniciativa, plantearse continuamente la forma en la que se hacen las cosas, que sea capaz de asumir riesgos, asumiendo errores y aprendiendo de lo que sucede, y que sea proactivo, que dé el primer paso para afrontar problemas o buscar oportunidades), capacidad de gestión de equipos (capacidad para comunicarse eficazmente con los equipos, compañeros, clientes, etc. Ser flexible ante las situaciones que necesitan una mente abierta y tomar decisiones correctas y sólidas, no siempre las más fáciles). Y, por último, orientación a resultados (ser eficaz consiguiendo lo que se ha propuesto, ser eficiente utilizando los medios  y estar claramente comprometido con la visión y con los objetivos a corto, medio y largo plazo de la compañía).

Los recursos humanos conviven en un entorno tecnológico que busca aportar resultados al conjunto de la organización. ¿Cuáles son las claves para el éxito de la tecnología en relación con los recursos humanos? ¿En las organizaciones prima la cultura o el desarrollo digital? ¿Cómo conviven estos factores con el negocio?

La evolución que supone la digitalización es una constante en todos los negocios. En nuestra casa hemos pasado de tener un área multimedia independiente del resto de direcciones a entender que o somos multimedia cada uno en nuestra tarea o hemos perdido la batalla antes de librarla. Tenemos que entender que no solo nuestros productos, sino toda nuestra actividad debe estar inmersa en un cambio en este sentido.

Nuestro CEO suele decir una frase que es: “el que no cambie, no cabe”, y no me refiero solo a la mejora en destrezas digitales, sino a la estructura mental que lleve a cada persona a replantar su propio trabajo desde esta nueva perspectiva, como si empezáramos la empresa en este momento y pudiéramos construir cada proceso de cero. ¡No es una destreza nueva, es una mentalidad nueva! Y en este cambio, nuestra claridad de ideas como Recursos Humanos, nuestro empuje y nuestra insistencia, son claves.

La incorporación de los millennials ha revolucionado los valores y formas de hacer del mercado laboral. ¿Cómo lo percibe el área de RR. HH.?

Yo no creo en la dicotomía seniors/millennial, en lo que creo es en los beneficios claros de unir cada generación de la compañía y hacer que sientan el proyecto como algo propio, como algo en lo que deben involucrarse y sacar adelante entre todos. No creo en las características generacionales, sino en las cualidades personales y en el potencial que tenemos cada uno de nosotros de evolucionar profesionalmente.

Nuestra compañía ha sido reconocida en los Randstad Award durante los últimos años, no solo como la empresa con mejor Employer Branding del sector, sino como la empresa de España con mejor ambiente de trabajo y que es capaz de ofrecer el trabajo más interesante. Conseguir estos atributos y que el mercados laboral lo reconozca solo puede ser fruto de una labor de integración de todos los que trabajan en nuestra casa.

La importancia de la comunicación en recursos humanos

En las organizaciones actuales es muy importante el aprovechamiento del conocimiento interno. ¿Cómo se percibe esta cuestión desde el área de RR. HH. de una empresa de comunicación?

Para mí es muy importante y en nuestra compañía hemos puesto foco en ello. Voy a mencionar dos iniciativas que no solo intentan aprovechar ese conocimiento, sino activarlo: la primera es el proyecto que llamamos THINK, que consiste en entender que las personas tienen muchas cosas que decir en el desarrollo de la compañía y que esas ideas no solo tienen, sino que deben ser conocidas y valoradas. Se articula en tres procesos: Think Inspira (charlas tipo TED), Think Innova (generación de ideas) y Think Crea (la puesta en práctica real de esas ideas). En total se presentaron 800 ideas de mejora o nuevos proyectos, de las cuales el 70% tenían que ver con tecnología. Las 15 ideas ganadoras ya se están poniendo en marcha y alguna ya se puede ver en un programa de la cadena, en Neox.

Y el otro importante es un Máster interno que hemos creado junto con una Escuela de Negocio (EAE), Máster en Gestión de Empresas Audiovisuales, con título propio, en el que participan todas las áreas de la compañía y que persigue el que cada uno comprenda lo que hace el resto de compañeros, que entienda mejor sus decisiones y valore y se sienta orgulloso de su trabajo. Que en la interacción de diferentes áreas podamos identificar oportunidades y retos de futuro. Con todo ello, hemos conseguido un orgullo de pertenencia muy alto.

La función de recursos humanos está evolucionando muy rápido en los último años. ¿Cuáles son los pilares sobre los que se sostendrá la profesión? ¿Qué hay que cambiar? ¿Es cuestión de actitudes o aptitudes?

Claramente, creo que se sostendrá en la eficacia para ayudar a tomar las mejores decisiones de negocio respecto a las personas (que recuerdo que es lo que todas las empresas manifiestan como la clave para el éxito de su compañía) y en la capacidad para saber impulsar -y digo impulsar, no seguir-, los cambios que llegarán necesariamente en los procesos y tareas del futuro. Para ello, hay que creerse más la profesión, hay que crear procesos más eficaces, hay que trabajar más el networking para compartir conocimientos y experiencias, y hay que seleccionar para este área personas apasionadas por las personas y por los Recursos Humanos, que sea algo vocacional, no algo coyuntural. Sin aptitud es imposible tener éxito, pero sin actitud, también.

Las experiencias que han tenido en 2018 en sus áreas de RR. HH. seguro les han aportado una visión de las nuevas tendencias en la gestión de personas. ¿Qué hemos aprendido? ¿Cuáles son las tendencias de futuro?

Yo he aprendido tres cosas en 2018, que entiendo seguirán siendo claves en el futuro. En primer lugar, lo importante que es que el área de RR. HH. no se quede al margen del replanteamiento general que están haciendo todas las funciones de la compañía; debemos pensar desde cero y ofrecer soluciones nuevas al negocio también desde nuestra actividad.

Lo segundo es la seguridad de que, en nuestra tarea, el foco no puede ser la tecnología sino las personas, que son las que seguirán marcando el futuro de nuestras organizaciones.

Y en tercer lugar, en la importancia de crear estructuras y procesos que empoderen a las personas en su trabajo. El éxito se basa en lograr que todos pongan al servicio del objetivo común sus cualidades, y creo mucho en la iniciativa, en delegar como forma de hacer crecer a la empresa y a las personas, en la coherencia de las decisiones y de los comportamientos, en ser accesible y escuchar, y en la eficacia, en orientarse siempre a conseguir los resultados.