En un entorno laboral en constante evolución, el employer branding ha emergido como un elemento esencial para las empresas que desean destacar en la atracción y retención del talento. Pero, ¿qué hace realmente sólida a una marca empleadora?
Hablamos con Beatriz Palacios, Brand Strategy Manager en WTC Spain, quien nos comparte su experiencia y visión sobre cómo las empresas pueden construir una identidad auténtica que conecte con los valores de los profesionales actuales.
Desde el rol fundamental de la autenticidad hasta la importancia de los empleados como verdaderos embajadores de la cultura corporativa, Beatriz nos invita a repensar las estrategias tradicionales para competir en un mercado cada vez más exigente.
Employer branding, ¿un concepto de moda?
En los últimos años, el término employer branding ha estado en boca de todos. Se menciona en conferencias, encabeza los titulares de multitud de artículos y aparece constantemente en conversaciones estratégicas de profesionales de Recursos Humanos. Pero, ¿es realmente más que una palabra de moda? La respuesta es un rotundo sí, y si aún no has comenzado a prestarle la atención que merece, es momento de cambiar de perspectiva.
Solo un par de datos de estudios recientes que añadir para demostrar que no es solamente un trending topic, sino una estrategia de negocio clave para las compañías: el 75% de los candidatos investigan a fondo la reputación de una empresa y lo que se dice de su marca empleadora antes de plantearse enviar su CV. Y por su parte, las compañías admiten que con una marca empleadora sólida reducen sus costes de contratación en un 50% y disminuyen la rotación de empleados en un 28%. Y esto, no es solo un ahorro en tiempo y dinero, sino una mejora en el rendimiento general de la empresa, ya que contar con el talento adecuado impulsa la productividad y la innovación. ¡Ahí es nada!
Así que vamos a profundizar en qué es el employer branding, por qué es vital para las empresas hoy en día y cómo impacta en el éxito organizacional.
¿Qué es el employer branding?
En términos sencillos, el employer branding es la imagen que una empresa proyecta como lugar para trabajar. Es cómo los empleados actuales, potenciales y ex empleados perciben a la organización. Concreto y directo, pero complejo en su creación pues incluye desde la cultura laboral hasta los valores, las políticas y las experiencias de los empleados.
Mientras que la marca corporativa se centra en cómo la empresa es percibida por los consumidores, el employer branding tiene como objetivo atraer y retener a los mejores talentos. Hoy, las empresas no solo venden productos o servicios, sino también venden una experiencia de trabajo.
El employer branding toma fuerza porque las reglas del juego en el mundo laboral han cambiado.
En el pasado, los candidatos buscaban principalmente seguridad laboral y un buen salario. Ahora, buscan mucho más: crecimiento profesional, un ambiente laboral positivo, un propósito y una alineación de valores entre ellos y la empresa. Y en describir y comunicar todo esto es en lo que se centra una buena estrategia de marca empleadora.
Por otro lado, las redes sociales y plataformas como Glassdoor han dado poder a los empleados para compartir sus experiencias laborales con el mundo. Una mala reseña puede disuadir a futuros talentos de unirse a la empresa, o contenidos cuidados y que demuestren cómo se cuida el bienestar de sus empleados o cómo son los protagonistas de un bonito propósito en LinkedIn, puede conseguir el efecto contrario y atraer al mejor talento. Es por esto que cuidar la marca empleadora sea una necesidad estratégica, no solo una tendencia pasajera.
Y ahora bien, ¿Cómo construir una buena estrategia de employer branding?
No es un proceso sencillo, y mucho menos vanal. Se necesita a profesionales expertos para construirla, pero sobre todo es clave que haya una apuesta en firme por parte de la dirección de la compañía. Pues como ya hemos mencionado anteriormente, es un área de actuación que afectará al propio negocio y requerirá tomar decisiones que exceden al propio ámbito de la comunicación. Aun así, aquí van algunos puntos clave que se han de dar para garantizar el éxito:
- Tener clara la esencia de la compañía y su cultura: El primer paso es tener claro quién eres como empresa. ¿Qué valores te definen? ¿Qué hace única y atractiva tu cultura organizacional? Una marca empleadora auténtica se construye desde la verdad y la relevancia, y a poder ser desde la diferencia.
- Alinear a la organización e involucrar a tus empleados: Tus empleados son los mejores embajadores de tu marca. Escucha su opinión y hazlos partícipes de la estrategia de employer branding. Si tus empleados están comprometidos y hablan bien de su experiencia laboral, atraerás a otros con perfiles similares.
- Ser coherente y consistente en el mensaje a través de los canales de comunicación: Las plataformas digitales son una gran herramienta para mostrar tu cultura laboral al mundo, sin olvidarse de que cualquier punto de interacción offline con el talento, comunica. Comparte historias de éxito de empleados, destaca logros colectivos y muestra la vida diaria en tu empresa. El contenido visual y los nuevos formatos de comunicación son una excelente manera de hacerlo.
Y parece ser que el employer branding ha llegado para quedarse.
Desde nuestro conocimiento, podemos afirmar que parece ser que su relevancia seguirá creciendo en los próximos años. Tal y como menciona Ranstad en su estudio Employer Brand Research 2024, las generaciones más jóvenes, la Generación Z es relativamente más proclive a dejar su empresa como resultado de una falta de alineación con sus valores personales. Para ellos, trabajar en una empresa que comparta su visión del mundo es tan importante como el salario.
En conclusión, es mucho más que una simple tendencia pasajera. Es una estrategia que muchas empresas ya están aprovechando para atraer, retener y motivar al mejor talento. Y aunque pueda sonar como una moda, su impacto es real y duradero. Así que, si aún no has comenzado a trabajar en tu marca empleadora, nunca es tarde para empezar. ¡Manos a la obra!